Más de la mitad de las mujeres periodistas han experimentado un aumento de las desigualdades de género debido a la Covid-19, según se desprende de una encuesta realizada por la Federación Internacional de Periodistas (FIP), entre 558 mujeres periodistas en 52 países, y e la que España ha sido el más participativo.
La mayor organización mundial de periodistas profesionales y su Consejo de Género, han hecho en este sentido un llamamiento a las organizaciones de medios de comunicación y a los sindicatos para que hagan de la igualdad de género una prioridad en su respuesta a la pandemia y exijan medidas concretas para proporcionar a sus colegas mujeres condiciones de trabajo decentes.
Esta encuesta se llevó a cabo entre el 19 y el 30 de junio, y en ella más de la mitad de las encuestadas reconocieron un aumento de las desigualdades de género en las empresas, con consecuencias devastadoras en su conciliación de la vida laboral y privada (62 %), las responsabilidades laborales (46 %) y los salarios (27 %).
El 66 % declaró ser miembros de sindicatos, al tiempo que más de las tres cuartas partes de las encuestadas vieron aumentar su nivel de estrés y la mitad de ellas señalaron que la causa principal eran las tareas múltiples.
Además, más de las tres cuartas partes de las encuestadas dijeron que el nivel de acoso, incluso o-line, y la intimidación no han aumentado durante la crisis, mientras que la mitad de las encuestadas dijeron que su salud se había visto afectada, principalmente por problemas de sueño.
En otro orden de cosas, sólo 4 de cada 10 mujeres periodistas afirmaron haber recibido un equipo de protección de sus empleadores; mientras que 6 de cada 10 dijo que su empresa le había proporcionado algún tipo de protocolo para el teletrabajo; y un tercio afirmóque trabajaban “principalmente desde casa” por otro tercio que lo hizo principalmente en la oficina.
Las encuestadas formularon algunas recomendaciones para mejorar los protocolos de teletrabajo, entre las que destacan la necesidad de que los empleadores proporcionen equipo de trabajo adecuado, incluido un ancho de banda suficiente, que definan las horas de trabajo y los descansos, y que comprendan la realidad del trabajo desde el hogar mientras se cuida a los niños.
En general, la mayoría de las encuestadas estuvieron de acuerdo en que las mejores estrategias para lograr una nueva norma de igualdad de género eran de naturaleza económica, incluidas más financiación, mejores salarios, y más oportunidades de ascenso profesional.
La presidenta del Consejo de Género de la FIP, María Angeles Samperio, ha explicado en relación con los resultados de este trabajo que “los medios de comunicación y los sindicatos deben hacer mucho más para abordar las desigualdades de género y tener en cuenta la conciliación de la vida laboral y privada en estos tiempos turbulentos. Deben escuchar las peticiones de las mujeres que han sido profundamente afectadas por el estrés durante la COVID-19 y responder a ellas. Es hora de establecer políticas adecuadas de teletrabajo, garantizar el apoyo a las mujeres en sus tareas familiares y proporcionarles un trabajo decente e igualdad de remuneración".
Por su parte, el secretario general de la FIP, Anthony Bellanger, ha declarado con respecto a los resultados que “pedimos a nuestros afiliados que pongan la igualdad de género como prioridad en su agenda y que reflexionen sobre la mejor manera de apoyar a sus afiliadas femeninas. Este apoyo incluye proporcionar datos sobre las mujeres en la profesión, integrar el género en todas las actividades, ofrecer formación, situar a las mujeres en puestos de liderazgo en las propias estructuras de los sindicatos, crear comités de mujeres y políticas de género y negociar mejores acuerdos para las mujeres con los directores de los medios de comunicación. Es urgente cambiar el discurso para lograr que el género sea un tema importante en la nueva normalidad”.