"Desgraciadamente, la continua cobertura informativa de eventos relacionados con mi antiguo trabajo en 'News of the World' dificulta que dé el 110 % necesario en este papel", afirmó Coulson, que agregó que aunque no tiene nada de lo que retractarse, considera que "cuando un portavoz necesita un portavoz, es el momento de cambiar".
Coulson dimitió como director del "News of the World" en 2007 después de que el responsable de la información de la Casa Real Clive Goodman y el detective privado Glenn Mulcaire fueran procesados y encarcelados por intervenir los teléfonos móviles de ayudantes de miembros de la monarquía británica.
Tras el escándalo, Coulson admitió su responsabilidad como director de este dominical sensacionalista y renunció al cargo, pero siempre negó saber que se estaban realizando actividades ilegales. Una posterior investigación no encontró evidencias sobre su conocimiento o participación, pero varios ex periodistas del periódico aseguraron que pinchar los teléfonos era una práctica habitual y que contaba con el visto bueno de Coulson.
El caso se reabrió recientemente, después de que varias personas que aseguraron haber sido espiadas, entre ellas la actriz Sienna Miller, decidieran acudir a los tribunales en contra del dominical, el de mayor tirada del país, con unos 2,7 millones de ejemplares.
El Servicio de Fiscalía de la Corona (CPS) anunció tras la iniciativa de Miller que ha ordenado volver a examinar las pruebas de la investigación inicial y examinar las nuevas evidencias aportadas para determinar si hay que volver a la vía judicial. "The News of the World" reaccionó el pasado día 5 suspendiendo temporalmente a uno de sus redactores jefes, Ian Edmonson, acusado también de pinchar teléfonos para conseguir noticias.
David Cameron ha lamentado la decisión del que era uno de sus asesores más cercanos, aunque dijo entender las razones por "las continuas presiones que están sufriendo él y su familia".
La semana pasada, el primer ministro rechazó confirmar o negar los rumores sobre una inminente dimisión de Coulson para evitar que el escándalo salpicara al Gobierno, aunque admitió que su jefe de prensa se sentía "profundamente violento" por el caso.
La oposición laborista pidió a Cameron que comparezca en el Parlamento para explicar la renuncia de uno de sus colaboradores más directos y le acusó de intentar "enterrar" la noticia de la marcha de Coulson, en un día cargado de informaciones importantes.
El parlamentario Tom Watson consideró intencionado anunciar esta dimisión el mismo día que el ex primer ministro Tony Blair comparece ante la comisión que investiga la guerra de Irak y que se conocen los detalles de la dimisión del ex responsable laborista de Economía Alan Johnson, cuya esposa tuvo un romance con uno de sus escoltas.