Telefónica ha lanzado en España Movistar Protege, el servicio de control parental más completo y asequible del mercado que permite a padres y/o tutores legales proteger en tiempo real y desde cualquier lugar hasta 10 dispositivos móviles diferentes, de tal forma que puedan gestionar la vida digital de sus hijos con todas las garantías de seguridad para los menores.
A través de la web del servicio, los padres pueden conocer y supervisar la actividad on-line de sus hijos, establecer límites de uso responsable, bloquear contenidos inapropiados o peligrosos, localizar el dispositivo del menor y restringir ciertas aplicaciones, por una suscripción mensual desde 1,5 euros.
Además, Movistar Protege permite proteger todo tipo de dispositivos (PC, Mac, tablet, smartphone, iPad, iPod, iPhone y Kindle); configurar por cada dispositivo tantos perfiles como desee; establecer horarios de uso, tanto para navegación como para el uso de aplicaciones; tener un informe detallado diario, semanal o mensual con la actividad realizada en Internet o redes sociales por cada usuario; o recibir alertas si el menor visita páginas inadecuadas o excede el tiempo de uso establecido.
El servicio ya está disponible para los clientes de línea móvil Movistar - Movistar Fusión, Movistar Contrato y Movistar Tarjeta, bajo un modelo de suscripción mensual autorrenovable con tres modalidades que se adaptan a las necesidades de cada familia y sin compromiso de permanencia.
El único requisito indispensable para su contratación es que el padre o tutor legal del menor sea titular de una línea de Movistar, no siendo necesario que los menores tengan línea con la compañía.
Movistar Protege responde a la creciente demanda de nuevas soluciones de seguridad y supervisión en Internet por parte del consumidor. Internet ha modificado la vida cotidiana convirtiéndose en un medio de contacto cada vez más versátil y potente tanto para los adultos como para los más pequeños de la casa, de tal forma que se ha disparado el uso del ordenador entre los niños: desde un 32 % a los 4 hasta un 94 % a los 13 años.
A la hora de acceder a Internet, el crecimiento es también constante: de un 20 % por parte de los niños de 4 años hasta un 90 % en el caso de los adolescentes de 13 y el hogar es el principal lugar de acceso a Internet.
A pesar de los muchos beneficios que aportan las nuevas tecnologías, Internet y las plataformas de difusión de contenidos son una fuente de propagación de contenidos no adecuados para los menores de edad. Según un estudio del Observatorio de la Seguridad de la Información, un 5,9 % de los chavales afirman haber sido víctima de ciberbullying, mientras que un 2,9 % reconoce haber actuado como acosador.
Y según diferentes estudios, el 90 % de los niños que sufren algún tipo de incidente en el mundo digital no trasladan sus problemas a su entorno familiar. El 61 % de los padres no saben que su hijo contactó off-line con desconocidos y el 56 % de los padres no sabe que su hijo recibió mensajes con contenido sexual (sexting).