El informe “Nuevas oportunidades y nichos de ocupación para periodistas” elaborado por el Colegio de Periodistas de Cataluña, con el apoyo de Barcelona Activa, señala la digitalización, la divulgación científica y la sostenibilidad como vías para abrirse camino a nuevas salidas profesionales en el sector de la comunicación.

En la presentación del informe, el catedrático de la Universidad Ramon Llull, Jose Luis Micó, ha apuntado que las conclusiones del mismo son "similares" al realizado hace una década, y ha abogado por la necesidad de formación especialmente en el ámbito tecnológico.

Según el informe, las universidades ofertan cada año alrededor de 2.000 plazas para alumnos que pueden acabar convirtiéndose en periodistas y, con datos de 2019, nueve de cada diez consiguen trabajo durante los tres años posteriores a la titulación.

Del 91 % de graduados de periodismo que lo consiguen, un 47,6 % lo hace con contrato fijo, un 28,8 % con uno temporal y un 19,1 % como autónomo. Desde una perspectiva de los salarios, un 47,7 % de los nuevos profesionales son mileuristas, un 37,3 % llegan a los 2.000 euros, y solo un 15 % superan esa cifra, este último dato lejos del 32,1 % de titulados del sistema universitario catalán con ingresos superiores a los 2.000 euros.

El director general de Barcelona Activa, Félix Ortega, ha asegurado que el trabajo intenta "mapear" el futuro de los trabajadores, y ha remarcado que quiere dar tanto respuesta al momento presente, como plantear estrategias de futuro.

La mayor parte de las voces entrevistadas para la elaboración del informe coinciden en señalar que los perfiles digitales son los más demandados, tanto por periodistas como por profesionales de la comunicación corporativa, y el estudio apunta hacia una tendencia emprendedora y la creación de proyectos del mundo comunicativo, tanto de creación de nuevos formatos y medios, como la aparición de empresas emergentes como las de verificación de datos.

El estudio también apunta a la educación mediática como herramienta de lucha contra la desinformación, como otro de los ámbitos con salidas, y se considera que los profesionales pueden ejercer de educadores mediáticos en los centros educativos.

Otras de las salidas que ve el informe son la divulgación científica, que ha tomado especial impacto tras la pandemia de coronavirus, ya sea para buscar información y redactar solicitudes de subvenciones y ayudas, o ejerciendo el periodismo de datos.

Micó ha explicado que no es un informe "pesimista y derrotista, sino que hay retos y oportunidades" y ha abogado por no dejar de formarse, ya que lo necesita tanto el sector como la sociedad.

El decano del Colegio de Periodistas, Juan María Morros, ha señalado por su parte, que el estudio permite hacer una "radiografía bastante precisa del oficio diez años después del anterior, y vuelve a poner de relieve el papel clave de los comunicadores". Por último, la comisionada de Promoción del Empleo y Políticas contra la precariedad laboral del Ayuntamiento de Barcelona, Raquel Gil, ha subrayado que los periodistas ejercen de "traductores de la realidad", y que el impacto tecnológico abre nuevos nichos.