El Ministerio de Hacienda ha confirmado que publicará en el cuarto trimestre de este año el listado de deudores con el fisco, que incluirá a los morosos que a 31 de julio de 2015 tengan deudas pendientes de más de un millón de euros. Se incluirán las personas físicas y jurídicas con potencial económico que deban a Hacienda más de un millón de euros, y a los que les hayan vencido los plazos de ingreso en periodo voluntario.

Con este anuncio, la Agencia Tributaria persigue propiciar el cumplimiento voluntario y el ingreso efectivo de las deudas, puesto que el riesgo de salir en la lista puede animar a los morosos a saldar su deuda con el fisco.

Según fuentes conocedoras de estos planes, Hacienda tiene previsto citar y dar audiencia a algunos de estos nombres que están, en este momento, destinados a ser incluidos en la lista. En las últimas semanas, está contactando con algunos de estos contribuyentes para apremiarles a que salden sus deudas.

Algunas fuentes apuntan que uno de los sectores que ha recibido la advertencia de técnicos de la Agencia Tributaria es el de los medios de comunicación, a los que se ha informado de que tienen la posibilidad de abonar la cantidad que adeudan al fisco y así librarse de aparecer en la lista, o también negociar una salida a su situación con Hacienda.

El Estado tiene mecanismos, como por ejemplo permitirles el aplazamiento de la deuda contraída con Hacienda y la Seguridad Social, o retrasar el pago de impuestos y de las cotizaciones sociales, sobre todo si la persona física o jurídica necesita apoyo para mantener su actividad.

Según los expertos que conocen bien las cuentas de los grandes grupos de comunicación españoles, la prensa es uno de los sectores que más deudas acumula con Hacienda. De momento, no es posible conocer las cantidades exactas que adeudan; ya que por motivos de confidencialidad, Hacienda no puede facilitar información sobre la situación fiscal de un contribuyente concreto. Sin embargo, el Ministerio trabaja para reformar el artículo 95 de la Ley General Tributaria y la Ley de Protección de Datos con el fin de que sea posible hacerla pública después del verano.