Lorente & Cuenca se consolida como la consultora de comunicación con más beneficios en España

Las 30 agencias de comunicación que conforman el ranking de facturación del Informe PR 2017, elaborado por Torres y Carrera en colaboración con PR Noticias, han obtenido 233.833 euros de beneficio de media en 2015, lo que supone un incremento del 17,9 % respecto al ejercicio anterior.

Las agencias que mejor rendimiento obtuvieron fueron ATREVIA, que multiplicó casi por 7 sus beneficios (+695 %), al igual que apple tree communications (+542 %) que los multiplicó por cinco en comparación con los resultados del ejercicio anterior.

Por el contrario, en la cola del ranking de las agencias que más facturaron en España está Ogilvy con sus dos empresas, que terminaron el año con un saldo negativo, -111.724 euros Ogilvy PR y -755.635 Ogilvy & Mother Barcelona.

El estudio confirma que Llorente & Cuenca es la agencia que más beneficios obtuvo en 2015, concretamente un 11,18 % más que el año anterior con 1,3 millones; situándose en segundo y tercer lugar Weber Shandwick y Burson Marsteller, con 1,01 millones de euros de beneficio la primera y 858.444 euros la segunda.

El top 10 de las agencias que conforman este ranking de beneficios ha conseguido 356.500 de media euros de beneficio, un 13,33 % más que en 2014, cuando sus beneficios fueron de 309.109.

Por otra parte, el análisis revela que las empresas del top 20 son las que mejores resultados han obtenido, puesto que el porcentaje de beneficios se eleva hasta el 401,59 % más, con una media de 875.577 euros. Por último, la media del top 30 se sitúa en -5.230 euros, con un porcentaje de pérdidas del 104,7 %.

El Informe PR 2017 es un trabajo realizado por el área de Estudios e Investigación de la consultora de comunicación Torres y Carrera en colaboración con PR Noticias, basado en datos obtenidos del Registro Mercantil y contrastados por las agencias de comunicación incluidas en el análisis. Estas fuentes condicionan las fechas de consulta ya que los últimos datos del INE corresponden a 2014 y los de las empresas a los últimos cierres contables públicos (2015).

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